domingo, 4 de diciembre de 2011

Un Camino de Mil Millas Comienza con Un Solo Paso


Cuando inicias una temporada lo primero que haces es buscar en el calendario cual es la prueba que le va a dar sentido a tu preparación, aquella que te va a motivar para afrontar todo el duro trabajo que te espera, la que en los días fríos y lluviosos te hará salir por la puerta sintiendo el calor que solo la ilusión es capaz de generar. Dejas volar la imaginación y apuntas a lugares tan altos que ni siquiera puedes alcanzar a ver. Y he ahí uno de los errores más comunes del atleta, nos olvidamos de los pasos intermedios.

Yo no soy una excepción, ni mucho menos. En muchas ocasiones he obviado el camino y pensado sólo en el destino. Y en ese preciso instante es en el que comienzas a alejarte de tu meta.

No estoy insinuando con esto que se deben de dejar los grandes retos a un lado; pues, como he dicho, sólo esos desafíos son los que nos dan ese plus que necesitamos para movernos. Lo que quiero reivindicar es la excelencia del “paso a paso”, recalcar que la verdadera grandeza de un logro no está en el fin mismo sino en el proceso.

Todo esto viene a propósito de una pregunta recurrente en nuestro mundillo: “¿cuáles son tus objetivos?”

El que este año el campeonato de España de cross vaya a ser en Gijón hace que las cuestiones sobre tus metas se centren en esa cita, como si entre medias solo hubiese un inmenso vacío. Pero, para llegar a ella con alguna posibilidad de hacer algo decente, primero hay que dar una serie de pasos que, no por ser más “modestos” (resaltar el entrecomillado), son mucho más importantes para el objetivo final: Ser mejor atleta año tras año.

El pequeño gran objetivo que yo me he marcado, como base de toda la preparación invernal, no es otro que volver a ser competitivo en el cross asturiano. En las últimas temporadas he ido progresivamente perdiendo comba con los primeros espadas del campo a través regional (y curiosamente, mi caída comenzó cuando dejé de darle importancia a las competiciones campotravesistas dentro de mi comunidad). De modo que volver a correr con ellos será la primera, y fundamental, etapa del viaje.

Hoy en Lugones siento haber dado el primer paso hacia ese objetivo base. He vuelto a disputarles una carrera de tú a tú a los mejores, y he salido alegremente victorioso. Parte del camino está andado. Para ser exactos un tercio, que es la proporción que representa el cross corto con respecto a los 12km que tendremos que correr en febrero en el Campeonato de Asturias.

Historias personales aparte, tengo que decir que el circuito superó enormemente mis expectativas. La organización, el ambiente, el lugar…todo un 10. Pongamos solo un pero, para que no digan que soy un pelota, y es que el circuito estaba claramente mal medido. O si no reclamo que se me reconozca el paso por el 3000 como marca personal.

En cuanto a la competición en sí, felicitar al Oviedo por su merecida victoria por equipos (en ocasiones viene bien que te ganen para demostrar que la victoria merece la pena). Pero sobre todo quitarme el sombrero ante mis compañeras, que se alzaron por encima de las bajas y los pronósticos consiguiendo un título que vale su peso en oro.

Una vez más reconocer el espectáculo y la emoción que nos ofrecen los juniors, destacando a Hugo García, que parece haber encontrado de nuevo la capacidad competitiva; y a Claudia Junquera, que hizo una espectacular remontada para imponerse a una valiente Beatriz Álvarez.

Y sin más, confirmación del siguiente paso en Avilés dentro de 15 días, más cross astur del bueno.

Resultados: www.fasatle.com

3 comentarios:

  1. Es una gozada leer tus entradas en tu blog Marcos.

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  2. Como bien dices estaba mal medido, acabo de saber que la distancia era de 3'8km, así que a sacar la calculadora y cada uno que haga su media por km (vaya frikis que somos!!!).Aunque yo también considero que es lo único que puede calificarse de "negativo" de la prueba de ayer.
    Otra entrada para reflexionar....sigue así Peón, dando pasitos....

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  3. Una gacela Massai, blanca pero de corazón negro, inició el viaje hacia las cimas del Kilimanjaro. Nadie estará allí para esperarle. Sólo la victoria.
    Enhorabuena Marcos.

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